Segundo día

Acabo de ver el Texas-New Mexico State, de la segunda jornada de la primera ronda del torneo NCAA (la segunda empieza el sábado) y Kevin Durant, sobre el que llevo todo el día leyendo artículos para documentar un reportaje, ha demostrado lo sobrado que va. Ha hecho un partido normal, no muy bueno en relación a su temporada. Pero, aún así, ha destacado y ha sido el mejor de su equipo y del partido: 27 puntos con 6 de 13 en tiros de campo y 15 de 16 en tiros libres, más 7 rebotes, 3 robos (y 5 pérdidas).

No creo que Texas tenga suficiente equipo para llegar a Atlanta -aunque me encante el otro freshman, el base DJ Augustine- pero la situación me recuerda a la del año 2003, cuando Carmelo Anthony, en su primer año, llevó a los Orangemen al título. Seguramente Syracuse tenía más equipo que Texas hoy, pero nunca se sabe; Durant es un superclase. Ahora ha empezado el Villanova-Kentucky, pero llevo dos días durmiendo unas cinco horas y me voy a dormir para que la locura de marzo no se convierta en mi locura.