Finales

Y bueno, los Spurs han ganado el anillo. Otra vez. Es la primera vez que escribo sobre la final; era necesario hacerlo antes? Siempre me interesa un partido de baloncesto, y el interés es todavía más obvio si es una final. Vi los tres primeros partidos como hago siempre, en diferido, en mi portátil, la mañana siguiente. Ayer por la noche programé el DVD y esta mañana me he llevado el disco para verlo al mediodía. Pero cuando he llegado a trabajar me he dado cuenta que, en realidad, no me lo he llevado. Se ha quedado encima de mi cama. Supongo que no estaba muy excitado por ver el cuarto partido: será cosa del subconsciente. Y la verdad es que cuando me he conectado a internet esperaba ver lo que he visto: sweep, y cuarto anillo en nueve años. No ha sido la final más emocionante de los últimos años, está claro, pero si que ha valido la pena ver -yo, al menos, en los tres primeros partidos- la perfección de ejecución de los Spurs. En defensa, en ataque, en transición, en estático. En cada momento hacen lo necesario para ganar. Gran parte del éxito es de Popovich y del, probablemente, mejor ejecutivo de la liga: RC Buford, que ha conseguido, con un trabajo de años, construir una dinastía, un equipo que es un engranaje perfecto. Tim Duncan fue la primera piedra, una elección obligada en el número uno del draft del 97, pero el gran mérito es la elección de Tony Parker en el número 28 (!) del draft del 2001 -el de Gasol y Raül López- y a Manu Ginobili en el 57 (!!) del de 1999 -luego llegó a la liga el 2002-. Ah!, y la apuesta por Bruce Bowen, y el fichaje de Robert Horry, etc. Conocimiento del mercado, planificación y paciencia, las claves de los Spurs, Y el talento claro.

Y por talento puede ganar el Barça la liga ACB. Tiene más que el Madrid -la gran mejora del juego interior del Barça puede ser la clave, a parte de Navarro- y, sobretodo, se ha quitado un peso de encima con la clasificación para la final y la Euroliga que viene. Como ya escribí, creía que era del todo posible que el Barça ganara el quinto. Pero no creía que lo hiciera de esa forma. Creo que el partido del Barça fue antológico, fantástico. Creo también que el Madrid ha hecho una temporada muy buena, y que merece jugar la final. Pero es obvio que las dos decisiones de Arteaga en el final del quinto partido contra el Joventut fueron nefastas. Probablemente el Madrid habría ganado igualmente el partido, pero las dos decisiones -repetición del tiro libre y antideportiva a Vázquez- fueron, simplemente, erróneas. Pero la final es la que es, y no está nada mal! Apuesto a que será más igualada que la de la NBA...